El equipo de Toto Wolff optó por un diseño extravagante con el nuevo coche y parecía haber perdido por completo el tren en la primera parte de la temporada con los llamativos pontones estrechos.
El W13 era imposible de controlar y, por lo tanto, no tenían manera de competir con Ferrari y Red Bull Racing.
A eso se le agregó el problema del efecto marsopa y pronto fue una temporada para olvidar. Más adelante en el año, el departamento de desarrollo de Mercedes parecía estar comprendiendo cada vez más las nuevas regulaciones aerodinámicas.
En la mira
El campeón de 2016 habló de la campaña de Las Flechas de Plata y comentó el objetivo que tendrán para 2023: "La presión está un poco baja con el equipo ahora y han aceptado que ya no son los mejores ni los más rápidos en este momento.
"Mercedes está a la caza. Están muy motivados y tienen un objetivo claro: vencer a Red Bull el año que viene y llevarlos en el invierno.
"Esa es una gran motivación para ellos. Mercedes será muy fuerte mentalmente durante los próximos meses y hacia el próximo año", comentó Rosberg en Any Driven Monday.