Lewis Hamilton eliminó repentinamente todas sus publicaciones de Instagram a fines de 2017, lo que causó mucha confusión y conmoción entre sus seguidores.
Algún tiempo después, el británico regresó a las redes sociales, pero no quedó claro por qué hizo lo que hizo.
Tenía mucho que ver con un video que publicó el día de Navidad de 2017. Hamilton subió un video que mostraba a su sobrino con un vestido de princesa.
"Estoy tan triste en este momento. Mira a mi sobrino ahora.
"¿Por qué llevas un vestido de princesa? ¿Esto es lo que compraste para Navidad? ¿Por qué pediste un vestido de princesa para Navidad? ¡Los niños no usan vestidos de princesa!", expresó en ese momento.
El video recibió muchas críticas. Esto conmovió tanto al británico que decidió eliminar todo su contenido en Instagram.
"Lo que hice fue muy estúpido"
Lewis admitió en charla con Vanity Fair que "eso fue tan estúpido" y de inmediato decidió hacer algo al respecto.
Al día siguiente borró el video y poco después todo su canal de Instagram quedó bloqueado. La cuenta de Hamilton todavía existía, pero no había más contenido para ver.
Causó revuelo en Internet, pero ahora está claro por qué Hamilton hizo esto.
"Simplemente no soy el tipo de persona que quiere lastimar a alguien. Y la idea de que podría haber lastimado a alguien a través de una publicación estúpida o simplemente algo que dije, nuevamente por ignorancia, me recordó cómo me sentía cuando me sucedían ciertas cosas”, detalló.
Hamilton quería arreglarlo
El hecho de que bloqueó todo su canal de Instagram fue por solidaridad con la comunidad LGBT
"Me di cuenta de que estaba mal, así que busqué formas, no para deshacerlo, sino para mostrarle a la comunidad que la apoyo.
"Es difícil en el mundo de hoy. Es difícil deshacer las cosas”, admitió el ahora siete veces campeón mundial.
Eventualmente, Hamilton fue con parte de su familia a Disneyland París y allí caminó de la mano de su sobrino, quien vestía un flamante vestido de princesa.
"Es una locura, pero tienes que aprender de un niño de seis años", concluyó el británico.