El romance que Sergio Checo Pérez vive con Red Bull parece estar en pausa luego del Gran Premio de Canadá. Nada salió bien ahí y ahora ha declarado que está molesto con el coche.
En Montreal sufrió su segundo abandono de la temporada. El primero fue en Bahréin por problemas con el RB18 y esta vez pasó algo similar.
El mexicano reclamó. Desde que acabó la carrera avisó que su caja de cambios necesitaba ser cambiada y que no obtuvo la respuesta que quería.
Después fue un poco más lejos y reconoció su hartazgo por lo que ha ocurrido en el Circuito Gilles Villeneuve.
“Me estoy cansando un poco de esos problemas de confiabilidad", admitió en charla con Viaplay.
Checo reveló que su monoplaza está padeciendo más con la marsopa que en otras ocasiones, lo que también lo tiene frustrado.
"Todos están presionando mucho con todo. Probablemente también tenga algo que ver con las nuevas reglas. El coche rebota mucho más, así que tendrás que lidiar con varios problemas", expuso.
"Perdí puntos preciosos"
Pérez insistió en que quedarse sin sumar en Canadá fue realmente doloroso, aunque confió en que pueda recuperarse en las siguientes semanas.
"Simplemente pierdes puntos preciosos si tienes que escribir un puntaje cero cuando luchas por el campeonato. El campeonato aún es largo. Me duele ahora, así que lo olvidaré lo antes posible", expresó