Max Verstappen y Lando Norris protagonizaron un bochornoso incidente en el circuito de Spielberg cuando en búsqueda de ganar la carrera, ambos autos terminaron chocando para dejar sin poder terminar la carrera a Norris y fuera del podio a Verstappen.
Esta batalla que derivó en la victoria de George Russell seguido de Oscar Piastri y Carlos Sainz, pero también mostró un lado de la Fórmula 1 poco deportiva y poco agradable.
El circuito de Interlagos fue testigo de una de las más épicas batallas entre pilotos, en ese cierre de la anterior temporada donde Checo y Alonso montaron un absoluto espectáculo.
En las vueltas finales de la carrera, el asturiano y el mexicano sacaron lo mejor de sus autos para de la manera más limpia posible realizar constantes rebases uno al otro.
Dicha batalla fue ganada por Fernando Alonso, pero las sensaciones de una verdadera carrera y una batalla con todas las de la ley quedaron en la retina de los aficionados al automovilismo de manera permanente.