El Gran Premio de Austria confirmó el gran problema en el que se encuentra Checo Pérez en el campeonato de pilotos.
La dramática forma en la que se definió la carrera en Spierlberg dejó aún más cerrado el campeonato y generó que dos pilotos se acercaran aún más al piloto mexicano de Red Bull.
Por el lado de los hispanos, Carlos Sainz fue el mejor calificado en tercer lugar de la carrera y Fernando Alonso acabó fuera de la zona de puntos, por lo que su vuelta rápida no sirvió de mucho.