El piloto mexicano se ha vuelto involucrado en un nuevo incidente con su compañero holandés, esto ahora en una situación que se le salió de control a la empresa de las bebidas energéticas.
Con la pausa en el calendario de la Fórmula 1, los pilotos del equipo con base en Milton Keynes ideó una competencia entre sus pilotos con botes de radiocontrol.
Ambos pilotos pasaron de un muy agradable momento pilotando sus botes de control remoto, buscando emular sus grandes habilidades en sus monoplazas de Fórmula 1.
El momento más gracioso del evento fue cuando el gen competitivo de ambos pilotos entró en acción y pusieron sus botes a toda velocidad, al grado que no pudieron controlarlos y terminaron chocando de manera fuerte una con otra.
Checo y Max volverán a la pista el próximo fin de semana en el Gran Premio de Canadá, con el mexicano buscando recuperar puestos en la clasificación de pilotos, mientras que el neerlandés busca afianzarse en lo más alto de la competición.