Las conclusiones más importantes tras el Gran Premio de Mónaco

El fin de semana pasado, Charles Leclerc ganó el Gran Premio de Mónaco de F1, poniendo fin a la maldición de Mónaco. Max Verstappen y Red Bull Racing lo pasaron mal, mientras que hay más conclusiones que sacar del fin de semana de carreras en Mónaco.

De hecho, Leclerc dominó todo el fin de semana en Mónaco. Leclerc se mostró fuerte durante el entrenamiento y pudo capitalizarlo por tercera vez en su carrera el sábado al conseguir la pole position.

Gracias a una bandera roja temprana durante la carrera del domingo, que permitió a todos cambiar los neumáticos, el factor estratégico también fue eliminado de la carrera y Leclerc condujo hasta la meta de manera controlada para conseguir su primera victoria en Mónaco.

Oscar Piastri quedó segundo y Carlos Sainz tercero. Verstappen tuvo que conformarse con la sexta posición, mientras que Sergio Pérez y los dos pilotos de Haas ya se habían retirado tras la primera curva tras una mega caída.

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Leclerc acaba con la maldición

Antes del fin de semana en Mónaco, en los últimos años, y nuevamente este fin de semana, se habló de la maldición con la que tuvo que lidiar Leclerc en Mónaco.

El monegasco había conseguido dos veces la pole en su país y no pudo aprovecharla durante la carrera, mientras que el monegasco aún no había ganado la carrera desde otras posiciones de salida. El fin de semana pasado finalmente las cosas le salieron bien a Leclerc.

El piloto de Ferrari partió desde la P1 y no quiso revelar esta posición. Esto se debió en parte al primer coche de seguridad, que garantizaba que todos pudieran cambiar neumáticos, cumpliendo así con la normativa, y entonces no habría más paradas en boxes para muchos pilotos.

Como resultado, las acciones de adelantamiento ya no fueron posibles, lo que significó que nada cambió entre los diez primeros durante el resto de la carrera. Así, Leclerc acabó con la maldición y ganó por primera vez la carrera de casa.

¿Quién tuvo la culpa del choque de Checo Pérez?

El momento de la carrera, y también el momento en el que la carrera de Mónaco se volvió extremadamente aburrida, fue el choque de Nico Hülkenberg, Kevin Magnussen y Pérez.

Tras el primer córner, Magnussen intentó pasar a Pérez por la derecha, pero parecía que no había suficiente espacio. Las opiniones están divididas sobre si Magnussen fue demasiado agresivo o dejó a Pérez muy poco espacio.

El caso es que la FIA decidió no sancionar a nadie, al igual que ocurrió con el incidente entre Piastri y Sainz. Esta fue una noticia especialmente buena para Magnussen, porque el danés tiene dos puntos de penalización por suspensión. Así evitó esta suspensión en Mónaco.

Red Bull y otro fin de semana difícil

En Imola, Verstappen y Red Bull lo pasaron muy mal durante el fin de semana, culminando en las últimas vueltas del Gran Premio. Red Bull esperaba que esto fuera algo puntual, pero nada resultó más alejado de la realidad en Mónaco.

Desde los primeros entrenamientos hasta la clasificación, Verstappen se quejó de que el coche rebotaba, poniendo incluso como ejemplo un 'canguro'. El punto más bajo se produjo durante la Q3, cuando Verstappen cometió un error en su última vuelta rápida.

Como resultado, partió desde la sexta posición y, después de que la bandera roja eliminó el aspecto estratégico de la carrera, fue imposible ganar algunas posiciones más. P6 fue la posición final del holandés.

Después del fin de semana, el jefe del equipo, Christian Horner, el asesor Helmut Marko y el propio Verstappen hablaron de un problema "fundamental" que debe resolverse en los "circuitos normales" de Europa. En cualquier caso, será música para los oídos de Ferrari y McLaren.

¿Guerra en Mercedes?

Este fin de semana también demostró que Mercedes ya prefiere a George Russell cuando se trata de actualizaciones.

Lewis Hamilton dijo dos veces el fin de semana pasado que no tenía el alerón delantero mejorado y Russell sí, lo que según el británico fue especialmente beneficioso para su compañero de equipo durante la clasificación.

La razón subyacente es probablemente que Hamilton se irá a Ferrari después de 2024, algo que la propia Mercedes, por supuesto, nunca admitirá. Las cosas estaban inquietas en Mercedes, aunque el equipo podría estar relativamente satisfecho con el fin de semana con un quinto y séptimo puesto.

Hamilton tampoco estaba contento con la comunicación del equipo sobre el momento de su parada en boxes, ya que no tenía claro si tenía que presionar de inmediato para obtener una ventaja sobre Max Verstappen.

El resultado fue que Hamilton permaneció en la séptima posición y posteriormente no tuvo la oportunidad de adelantar al holandés.

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