El equipo de Sergio Pérez, Red Bull Racing F1, parece estar pasando de un problema a otro. Mientras la lucha por el poder que rodea a Christian Horner sigue en el campo austriaco, en el fondo acecha otro problema importante. La fuente de energía de Red Bull para 2026 tendría graves problemas, e incluso, Helmut Marko ya ha tenido una conversación con Ford.
La fuente de energía para 2026 en la que Red Bull está trabajando actualmente se estaría "quedando corta", informa De Telegraaf.
Según los informes, Marko ha informado a Ford de esto y les ha aconsejado que tomen medidas para una mayor cooperación con Red Bull: "También se dice que Marko aconsejó a su socio estadounidense Ford que se retirara del proyecto de motor con Red Bull, porque la unidad de potencia que se construiría para 2026 sería muy insuficiente", se lee en un artículo del matutino.
En septiembre del año pasado, Tim Coronel también expresó su preocupación por la colaboración entre Red Bull y Ford para 2026. Red Bull desarrollará una nueva unidad de potencia con Ford: "Debe haber algo de pánico allí. No creo que Red Bull realmente lo haya descubierto todavía", así le dijo a GPFans en ese momento.
"Es responsabilidad de Red Bull hacer que funcione. Permítanme poner eso primero y también creo que tienen el conocimiento interno, pero ¿podrán hacerlo en ese período? ¿Cuánto tiempo le llevó a Honda llevar una unidad de potencia a este nivel? ¿De verdad crees que puedes hacerlo más rápido? Me temo que el año 2026 no va a suceder. Eso es justo lo que te voy a decir", comentó.
El equipo de Milton Keynes ha tenido mucho éxito con los motores Honda en los últimos años, pero actualmente los japoneses tienen una representación mínima en el campo de Red Bull. A partir de 2026, el proyecto Red Bull Powertrains debe empezar a tirar del carro por sí solo, con la ayuda del gigante automovilístico Ford en el lado electrónico.
Red Bull sabía que estaban asumiendo un riesgo cuando comenzaron el proyecto Powertrains. La idea era hacer negocios con Porsche, pero los alemanes sólo querían cambiar si conseguían una parte del equipo, algo que a los dirigentes de Red Bull no les gustó.
Por lo tanto, Red Bull decidió desarrollar internamente su fuente de energía para el futuro, con componentes Honda como base sobre la cual construir. Ford se unió para brindar soporte en términos de componentes electrónicos y electrónica. El primer motor debería estar listo para la temporada 2026, pero los primeros resultados no parecen haber dejado una impresión abrumadora todavía.
De Telegraaf adelantó que Red Bull abrió una investigación interna por acusaciones sobre comportamiento inadecuado del jefe de Red Bull Racing, pero sin especificar los motivos.
Después, se hizo de conocimiento público, gracias a un reporte de BILD, que la situación era mucho más delicada. Se trataría de un supuesto envío de fotografías de Horner a una empleada de la compañía, siendo este un comportamiento inexcusable de parte de los jefes de la empresa de bebidas austriaca.
Tras darse a conocer que un abogado externo hizo una investigación privada sobre el asunto, finalmente Red Bull anunció que no se encontraron evidencias para tomar acciones en contra del jefe.