Aunque Ferrari dejó solo a Carlos Sainz en la celebración de su tercer lugar en Bahréin, el piloto español tiene claros sus objetivos, y entre ellos está el mexicano Sergio Pérez de Red Bull, quien al igual que él parece no ser valorado dentro de su escudería.
“Me adelanté a dos o tres coches para poder subirme al podio y al final me quedé con un Red Bull (Checo Pérez), lo que fue una agradable sorpresa. Es un resultado positivo, pero no suficiente y no es donde queremos estar, queremos más. Pero la realidad es que es un paso adelante comparado con el año pasado. Es un buen comienzo de temporada", destacó Sainz tras finalizar la primera carrera del año.
Esta temporada los ojos del mundo, o al menos muchos de ellos, están puestos en los que haga Sainz con su Ferrari, y desde la primera carrera ya quedaron claras las intenciones del piloto y su escudería, que lo dejó solo en la celebración del podio. Sin embargo, el madrileño sólo está enfocado en divertirse lo más posible en lo que puede ser su último año con el equipo italiano.
"Yo creo que no se le puede pedir más a este inicio. Ha sido una carrera muy divertida donde he adelantado, he tenido buen ritmo de carrera y me lo he pasado bien que era lo importante, sobre todo después de la pasada temporada en la que sufrí tanto en carrera, ya que siempre iba mirando en los retrovisores. Aquí en Bahréin tuve la posibilidad de atacar y poder pasármelo bien", señaló convencido.
El tercer puesto en Bahréin no marera a Sainz, pues tiene claro que en Arabia Saudita las cosas pueden ser muy distintas.
“Lo lógico es que Red Bull y McLaren, que son equipos muy buenos en circuitos de alta velocidad, sean muy competitivos, pero nuestro coche también ha mejorado en alta velocidad, así que espero que podamos ser fuertes allá también”.