Sergio Checo Pérez ha explicado en tono muy relajado que cuando detecta algo que no puede arreglar de inmediato, prefiere no pensar y simplemente dejar que fluya.
El mexicano ha vivido un 2023 con muchos vaivenes. Pasó de estar en la pelea por el título en el inicio de la temporada, a una crisis de resultados y luego, a asegurar el subcampeonato, su mejor resultado en la Fórmula 1.
“Me enfoco en las cosas que yo pueda mejorar y cambiar. Y en lo que no, intento que me valga madre (risas). Vivimos no sé cuántas semanas al año de viaje y estamos por todo el mundo. Viajamos de un continente a otro en cuestión de días", aseguró en charla con la revista People.
Después de correr en Estados Unidos, le toca ir a los Emiratos Árabes Unidos para cerrar este año. Eso suele ser sumamente desgastante.
"Por ejemplo, terminamos en Las Vegas y vamos directos a Abu Dhabi. Así es nuestra vida. Termina Abu Dhabi, tengo que ir a Japón con Honda. De Japón tengo que ir a Inglaterra. De Inglaterra tengo unos pocos días de vacaciones.
“Tenemos una agenda complicada, dura, pero también increíble; nuestras carreras como deportistas no son para toda la vida entonces soy muy consciente de ello y aprovechar mucho ahora. Estamos viviendo momentos increíbles que en pocos años serán recuerdos, entonces es importante disfrutarlos”, detalló.
Rutina
Para poder llevar ese estilo de vida, la preparación cuenta muchísimo y no es fácil.
“Físicamente tengo una rutina muy exigente, de mucha recuperación, necesitamos mantener nuestra forma física durante toda la temporada y los compromisos, todos estos viajes. Se vuelve muy difícil mantener la forma física como piloto de la Fórmula 1 por todos los compromisos que hay y mentalmente balanceado, pensando bien las cosas", sentenció.