Carlos Sainz confesó que usó a Lando Norris para ganar el Gran Premio de Singapur.
En las últimas vueltas el ritmo de George Russell y de Lewis Hamilton era demasiado alto. Las llantas del Ferrari y el McLaren no estaban rindiendo lo esperado y parar ya no era una alternativa.
Entonces, con Norris detrás, apostó por obligarlo a acelerar sabiendo que no lo iba a rebasar, para mantener detrás a los dos Mercedes. Estaba seguro que si el naranja perdía su segundo sitio, él no podría competir contra las Flechas Plateadas. Matar o morir.
“Tan pronto empecé a empujar, la degradación hizo efecto. Creo que Lando y yo deslizábamos mucho. Me sorprendió lo fácil que los Mercedes adelantaron a Charles y lograron alcanzarnos a Lando a mí.
"En ese momento pensé… ok, no va a ser fácil y va a haber pelea en estas cinco o seis últimas vueltas. Y ahí decidí cambiar la estrategia", explicó tras la carrera.
La situación fue simple: permitir que el Papaya Army acelerara a tope para que no pudieran alcanzarlo George y Lewis.
“Le di a Lando de forma descarada el DRS y eso nos ayudó a mantener a los Mercedes detrás y lograr la victoria para Ferrari", expuso.
Sin embargo, eso también tenía su riesgo. Apoyar de esa manera a su ex compañero implicaba que si él se equivocaba, también perdía el primer lugar. El riesgo era alto.
“No puedes cometer un solo error porque significa que Lando tendría la oportunidad de adelantarte. Pero decides darle DRS con la esperanza de que sea suficiente para mantener detrás a los Mercedes", destacó.
Insistió en si Russell y Hamilton derrotaban a Norris, todo terminaba para él. Había que apostar en grande para ganar.
“Hubo una vuelta en especial en la que Lando se estuvo defendiendo, que tuve que reducir muchísimo la velocidad para poder darle DRS de nuevo. Creo que ese movimiento salvó mi carrera y también la segunda posición de Lando.
"Si no, habríamos estado muertos. Si los Mercedes hubieran adelantado a Lando, creo que me hubieran pasado a mí con bastante facilidad,” admitió.
El reto
Pensarlo no le costó trabajo, pero llevarlo a cabo, sí. Sin embargo, no tenía otra alternativa, no conocía otra solución para no perder lo que había conseguido durante todo el Gran Premio.
“Es fácil de tener en mente, pero muy difícil de ejecutar. Se trata de ese compromiso de hacerlo y exponerse al riesgo adicional. Pero sentí que era mi única posibilidad real de ganar la carrera.
"Especialmente cuando escuché que Lando estaba lejos y tomé la decisión de frenar. Pensé… 'espero que esto funcione, porque si no podría quedar muy muy mal'”, sentenció.