Checo fue contratado para reemplazar a Alexander Albon y el movimiento resultó ser muy beneficioso para ambas partes. La escudería austriaca ganó el Mundial con Max Verstappen y ahora van por su segundo Campeonato de Constructores.
Por su parte, el mexicano ya tiene cinco victorias con el equipo radicado en Milton Keynes y sigue acumulando podios y puntos importantes.
Desafío
En conversación como AMuS, el corredor número 11 detalló los retos que tuvo al llegar a Red Bull Racing.
“Fue un desafío. Me uní a un equipo en el que el concepto del coche es significativamente diferente al que estaba acostumbrado. Tanto en términos de tuning del vehículo como de estilo de conducción o gestión de neumáticos.
"La gestión de neumáticos funciona 100 por ciento diferente en un Red Bull que en un Racing Point. Tienes que prestar atención a cosas completamente diferentes. Si hubiera sabido esto hace tres años, entonces habría sido aún mejor.
"Esto me ayudará en mi futura carrera porque he adquirido una perspectiva más amplia sobre muchas cosas. Los coches Red Bull marcan su tiempo de vuelta de forma diferente a un Racing Point o un Mercedes. Porque son diferentes en concepto”, comentó.